Disfrutadlo mucho, que yo también disfruté mucho escribiéndolo. Besazos y nos leemos en breve...
Mary Ann Geeby
Comenzamos a cenar…
Fernando siempre había sido un
amor y esta vez siguió en su línea. La conversación versó sobre el trabajo del
día siguiente, con lo cual me sentí mucho más cómoda de lo que en principio había
esperado. Además, haciendo uso de su sentido del humor, provocó mis carcajadas
en varios momentos, dándome así la oportunidad de descargar la tensión que me
acompañaba en las últimas horas. Al terminar de cenar, volvimos paseando hasta
el hotel, que no estaba demasiado lejos. Cogió mi mano y se la llevó a los
labios. La besó. Yo le pedí:
-Fer…
Él no me dejó terminar:
-Tan sólo te cojo de la mano. No hay nada malo en
ello, ¿verdad?
Sonreí y seguimos paseando,
charlando y riendo. Al llegar a la habitación, se paró frente a mí, me abrazó y
recostó mi cabeza sobre su hombro. De nuevo volvieron a mí las sensaciones que
me producía cada vez que me encontraba entre sus brazos. Primero me besó en la
sien, como hacía siempre. Después, acercando su boca a mi oído me advirtió:
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Fragmento del relato incluido en RELATOS ÍNTIMOS DE MARY ANN GEEBY.
Fragmento del relato incluido en RELATOS ÍNTIMOS DE MARY ANN GEEBY.
uff,,que larga la semana en holanda
ResponderEliminarRealmente sólo han pasado dos días. Les quedan otros dos... Y, de todos modos, yo creo que se les hará corta, pues sospecho que están disfrutando... (O quizá no...) Gracias Pedro por leerme. Y por tu comentario. Un besazo!! ;)
EliminarMarta nos va a matar con tanto sí pero no. ¡Puff! Maldito Pepito Grillo.
ResponderEliminarExacto, Cat!! Maldito Pepito Grillo!! Besos linda!! <3
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