sábado, 23 de julio de 2022

LAS RUBIAS TAMBIÉN LLORAN.

 SOBRE LA NOVELA:

La compré en este enlace de amazon, después de leer la reseña que hizo de ella, Nuria Pazos.


Sinopsis:

Eva está en el verano de su vida. Acaba de terminar los estudios y todas las expectativas son excitantes. El sol hace subir la temperatura. La música retumba sin descanso en fiestas que se prolongan hasta que rompe el naranja del amanecer. Tiene veintitrés años, una larga melena rubia y está ávida de nuevas experiencias. El prejuicio le hace poner distancia con unos ojos del color de la coca-cola que no paran de buscarla. Sin embargo, lo prohibido es demasiado tentador… ¿Qué hará Eva? ¿Quemar cada instante hasta que despunte el alba? ¿Entregarse a una pasión que la dejará en caída libre sin paracaídas?

Eva tendrá que reconstruir los esquemas de su mundo mientras se hace adicta a las miradas azul tormenta. En un trepidante viaje a Londres aprenderá a reconocer las relaciones tóxicas, a tomar sus propias decisiones, a abrir su mente y a replantearse sus ideas sobre el sexo y la amistad.

¿CONOCES A NOELIA RODRÍGUEZ?


Amazon: Noelia Rodríguez 

Facebook: Noelia RG 

Twitter: @noeliarodrigueznr

Instagram: @noeliarodrigueznr

 

MI OPINIÓN:

Compré esta novela después de leer la reseña que hizo Nuria Pazos en las rrss. No conocía a la autora y nunca había leído nada de ella.

Está escrita con corrección, posee un estilo juvenil y ligero, fresca y fácil de leer. Ideal para ratos de espera, para leer en la peluquería, en viajes o transportes o, como en mi caso, cuando paseo cerca del mar y descanso con una buena lectura.

Se trata de una novela actual, en la que te puedes permitir el lujo de viajar a Londres y perderte junto a la protagonista, ávida de huir temporalmente de su mundo actual. Junto a Eva, puedes tratar de evadirte de la realidad que en ocasiones ahoga e intentar establecer nuevas relaciones, conocer otras realidades, lanzarte a nuevos proyectos y ¡quién sabe!, a veces, hasta cambiar de vida.

Me resultó una de esas lecturas en las que fácilmente te metes en la trama y acabas (yo lo hago), hablando con la protagonista. Le recriminaba algunas de sus decisiones, quería advertirle… jajaja. Incluso, me hizo sonreír a veces y otras, emocionarme llegando a sentir sensaciones similares a las de la propia Eva. ¡Vamos, que me tocó la fibra! Os la recomiendo.

domingo, 29 de mayo de 2022

El pañuelo blanco.

 EL PAÑUELO BLANCO

(MARY ANN GEEBY – 29 – 05 – 2022)

Sonia despertó sola, como cada día. Empapada, igual que siempre. Y, a pesar de saber que en sus sueños se había corrido, seguía sintiéndose muy, pero que muy cachonda.

Recordaba perfectamente al enésimo Arturo con el que había estado la noche anterior. Aquellas manos serían imposibles de olvidar. De hecho, había estado a punto de preguntarle su nombre. Quizá podría haber hecho una excepción y, sólo por una vez, conocer algo de la identidad de éste. Porque pareció que podría haber algo más que sexo. Puede que un paseo, una cerveza o incluso un cine. Pero evidentemente hacéis que comenzar por el nombre. Y eso daba mucho miedo. Demasiado.

A su mente vino la conversación con su amigo Toni, cuando le hablaba de sus follamigos.

—No los llames así, coño. Llámalos amantes, como todo el mundo.

—Que no, Toni. Amante es la persona a la que se ama. Y yo no los amo, sólo los utilizo para el sexo.

—De acuerdo. Entonces ponles un nombre. Pero un nombre propio —propuso su amigo.

—¿Cómo? ¿A todos el mismo? ¿Como para no equivocarme? —quiso saber ella.

—Sí, a todos el mismo. Pero no para no equivocarte, sino para “encasillarlos” —aclaró él.

—Jajaja, no sé si puedo hacer eso. No se me ocurre un nombre —insistió Sonia.

—Arturo —había dicho Toni.

—¿Arturo equivaldrá a follamigo? Me gusta. Los llamaré Arturos.

Así pues, se habían quedado con ese nombre. Y jamás aparecía otro en su cama. De hecho, si alguno insistía en ello, simplemente lo borraba de su lista y jamás volvía por allí.

Sin embargo, esta vez, todo era diferente. ¿Y repetir? No sería la primera vez que lo hiciera: volver a acostarse con un tipo, intentar reproducir alguna -o todas- las sensaciones que le había despertado alguno de sus Arturos. En el pasado, ésta había sido una gran idea y todo seguía su ritmo natural. En varias ocasiones, las repeticiones se produjeron durante varias semanas y ambas partes habían resultado satisfechas por la decisión.

Pero Sonia sabía que en esta ocasión no era posible. Para repetir con un hombre, era indispensable la ausencia de sentimientos. Por ambas partes. De ahí que siempre se mostrara tan fría al terminar. Nada de mimitos, ni caricias. Besos, los justos. De ese modo, la casilla de las emociones siempre estaba protegida. Y por supuesto, siempre amanecía sola. Cachonda, pero sola. Sin embargo, en esta ocasión, él la había acariciado con la excusa del pañuelo blanco. Y a ella se le habían despertado sensaciones que pedían repetir el gesto una y otra vez. Él lo había hecho, sonriendo. Y los gemidos, que parecían de deseo, tenían otra temperatura. No tan ardiente, sino algo cálido, agradable, diferente… Sonia temía esos cambios.

Se levantó al fin, la fuerza de la naturaleza, que nunca perdona. Y acudió al cuarto de baño. Al volver, casi a tientas por no dar la luz, vio el pañuelo blanco. Había dormido a su lado, sobre la otra almohada.

Rompiendo todas sus normas y aprovechando que nadie podía verla, se lo acercó a su nariz y aspiró. ¡Inmenso! Su mente la trasladó a ese momento de la noche en el que él le había permitido tocarlo, al fin. Era tan suave que no puso evitar llevarlo a su cara. Y entonces lo había olido por primera vez. Anteriormente, nunca se había puesto tan cachonda con un aroma. Y es que no olía a perfume o colonia, sino a él. Evidentemente, ésa fue la razón de que se le escapara el primer gemido y, casi sin darse cuenta, había caído en aquella extraña red de sexo y deseo que él había tejido con tan sólo sus manos y su boca.

¡Vaya nochecita! Ya no recordaba cuántas veces se había corrido. Por eso, cuando él se fue, ella decidió que volvería a llamarle. Aunque tenía la esperanza de que se le hubiera pasado por la mañana. Despertar sola, una ducha y volver a la rutina siempre le hacían entrar en razón y sobreponerse a sus deseos más... ¿bajos? Nunca entendió muy bien ese calificativo. Ella lo habría cambiado por "altos", a juzgar por el subidón que le había dado tal concatenación de orgasmos en tan sólo tres o cuatro horas.

Entonces, ¿por qué seguía tan cachonda? Y ¿para qué había olido su pañuelo, en vez de guardarlo o tirarlo, como habría hecho otras veces? Puede que quisiera algo más que recrear ese momento en el que Arturo se lo puso en los ojos, le metió dos dedos en la boca y, dándole la vuelta, invadió su sexo con su miembro duro y caliente. Recordaba cada segundo y el punto exacto en el que volvió a meter un dedo en su boca para después, sentirlo en su ano. Todo sucedió sin pausas, pues ella sólo quería más de eso. Se corrió. Y entonces, se volvió a correr. Se dejó caer sobre las almohadas y el siguió penetrándola, con lo que se corrió de nuevo. Entonces Arturo, lejos de parar, aceleró el ritmo y la hizo correrse una vez más. Totalmente desmadejada, murmuró un improperio, lo cual le hizo volverse loco de deseo y la poseyó como si no hubiera un mañana. No paró hasta correrse él. Y entonces se dejó caer sobre ella.

Estaba claro que esta vez había sido diferente. Más intenso y más... adictivo. Por eso había olido el pañuelo, de nuevo. Entonces vio la nota. Eso sí rompía todas sus reglas, así que fue directamente al cubo del reciclaje. Y Sonia, a la ducha, derechita.

¡Qué estupidez! Si algo tenía de malo -o de bueno- el reciclaje era que no destruía los objetos, así que estaba claro que volvería a por la nota. Bueno, podía ir y romperla, sin leerla. ¿A quién quería engañar? Y ¿qué más daba? Ella no daba cuentas a nadie; beneficios de la soledad. Recuperó el dichoso papelito y lo leyó:

"Sé que llamas Arturo a todos tus follamigos para evitar conexiones de cualquier tipo. Pero yo me llamo así. Quiero volver a follarte. Llámame pronto.

Arturo".

Sonia desayunó y se fue a trabajar. Estaba claro que no podía alejar de su mente una noche tan intensa. Ni de su sexo. Bueno, no era dolor, sino molestia. Una maravillosa molestia que le hacía rememorar los embates de ese hombre, llevándole al orgasmo una y otra vez. Tampoco dejaba de pensar en el mensaje de Arturo. Lo cierto era que ni siquiera quería. Se repetía una y otra vez que tenía unas normas. Y servían para eludir situaciones como ésa. Pero se respondía que no tenía que dar cuentas a nadie: su vida, sus normas. Ella las ponía, ella las podía quitar.

Volvió a casa a primera hora de la tarde y, al abrir el portal, Arturo estaba esperando en la escalera.

-—¿Qué haces aquí, Arturo? —le preguntó, visiblemente enfadada.

—Vengo a buscar mi pañuelo —respondió él sonriendo—. Me lo dejé olvid...

—¡Y una mierda! —le interrumpió Sonia—. Mi vida, mis normas ¿recuerdas? No puedes romperlas, te llames Juan, Pedro o Arturo.

—¡Pero es que me llamo Arturo! —se excusó él.

-—¡Que me da igual, joder! Yo decido cuándo llamarte, no tú —sentenció ella.

Entraron en casa y Sonia fue directa a su cama.

—¡Toma tu maldito pañuelo! —Cogió el pañuelo y se lo tendió—. ¡Y ahora, vete!

Arturo se acercó, lo cogió y, lejos de irse, le acarició con él, pasándolo por la mejilla y la sien y llevándolo hasta su nariz.

En un primer momento, Sonia quiso apartarse, pero cometió un error: lo olió y le miró. Seguía enfadada. Fue a decir algo, pero él atacó su boca, besándola con fuerza.

—Te deseo y quiero follarte.

Hace ya muchos meses que Arturo es el único en la cama de Sonia. Algunas noches, él se queda a dormir, aunque luego vuelve a su casa. Ellos no son una pareja al uso. Tan sólo, salen muy a menudo a pasear, a tomar cervezas o al cine. Y, sobre todo, tienen sexo siempre que les apetece, lo cual sucede casi todos los días. No se piden exclusividad, no lo necesitan. Tienen lo que desean y satisfacen al otro, pues eso les llena a ellos mismos.

jueves, 14 de abril de 2022

CONSECUENCIAS DE RETAR A UN CONDE, de Lola P. Nieva.

 SOBRE LA NOVELA:

Puedes adquirirla en cualquier librería, así como en diversas plataformas digitales. Yo la compré en El corte inglés, aprovechando la circunstancia de que Lola vino a presentarla a Santander, de la mano de la escritora Yolanda Revuelta.

Sinopsis:

Lady Roselyn Domer, hija del conde de Dorchester, le promete a su madre en el lecho de muerte que no se someterá a ningún hombre. Al inicio de la temporada, ella y sus amigas Margot, Lily y Alice planean esquivar sus obligaciones sociales y eludir el matrimonio.

En el evento social más importante de la temporada, el gran baile que organizan los duques de Fitzwilliam en Londres, las cuatro se asignan un fingido trastorno nervioso para ahuyentar a los pretendientes.

Rose simula ser torpe y patosa, Margot finge tartamudear, Lily lanza insultos a discreción, y Alice estornuda violentamente a conveniencia.

El conde de Nortfolk, un hombre hermético y de carácter huraño, acaba de regresar de una de sus expediciones a Japón para encontrar al culpable de la muerte de su hermano pequeño. Junto con su sirviente nipón, Takeshi, acude a los eventos con ese único cometido hasta que descubre a una extraña debutante que se dedica a pisotear a sus compañeros de baile.

Cuatro damas y un duelo: batirse contra su destino.

Un conde sombrío que descubre la luz de una mujer singular.

¿Podrá Rose esquivar su propio corazón?

¿CONOCES A LOLA P. NIEVA?

La puedes encontrar en todos estos sitios:

Web: https://entremusas.wordpress.com/

Amazon: Lola P. Nieva

Facebook: Lola P. Nieva 

Twitter: @lolapnieva

Instagram: @lolapnieva

En muchas presentaciones y encuentros literarios. Además, si abres bien los ojos, puede que te la encuentres paseando por tu ciudad...

 MI OPINIÓN:

Muchas veces me han preguntado qué me llama la atención para comprar una novela: título, portada, sinopsis, autor-a, recomendaciones y/o presentaciones. Os voy a contar lo que pienso de cada cosa en esta novela, en concreto.

Este título… (Aish…) me lleva a la sinopsis: Regencia. ¿Os he dicho alguna vez que la regencia no me va? Pues no me va. Con lo cual, tenemos un problema. Por eso, cuando me enteré de que Lola sacaría esta novela, lo tuve claro: no pensaba leerla. Me daba pena, porque Lola me gusta, pero prefiero no leer sobre un género o temática que no me agrada.

La portada… Pues la verdad, que Lola me perdone. A ella le encanta, lo sé. Pero a mí no es que me maraville: no está entre mis favoritas, lo siento. Luego, cuando la escuché presentarla y las razones de esta cubierta, lo comprendí. Creo entender que es la portada adecuada, más, si tenemos en cuenta que esta novela es la primera de una serie de cuatro y todas tendrán en común la similitud del título y el diseño de portada.

(Jo, esto parece una opinión negativa. ¡¡Y os prometo que no lo es!! ¡Venga, que empieza lo bueno!)

La autora: Pues mire usted, todo lo que he leído de Lola me ha gustado mucho. Pero mucho, mucho. Es más, siempre he comentado, en mis opiniones, que es como si las hubiera escrito por o para mí. En todos los casos me había sentido identificada con uno o varios personajes y, viendo su comportamiento o actitud, he llegado a plantearme formas de resolver algunos momentos de mi vida. Por eso las novelas de Lola tienen un lugar preferente en mi biblioteca.

Todo ello, unido a la noticia de que vendría a Santander a presentarla y nada menos que de la mano de Yolanda Revuelta, me llevaron a estar en dicha presentación en primera fila y, por supuesto, a comprar la bendita novela. ¡Qué gran acierto!

Durante la misma (y aquí paso al cuarto punto), porque la mayoría de los presentes se la habían leído. Y pude comprobar cuánto habían disfrutado de ella. Se reían de escenas o situaciones que nada tenían que ver, en principio, con una novela de regencia “al uso”. También fue una idea que salió varias veces en aquel acto: la novela en general y la protagonista en particular se salían de los cánones y los límites de la regencia. Luego, cuando me la dedicó, entrecomilló la palabrita “regencia”, haciendo ver una vez más que esto era algo diferente.

Evidentemente la compré y me la he terminado en poco tiempo, a pesar de contar con muy poco tiempo por el trabajo. Volví a restar horas de sueño, a meter el libro en el bolso, para aprovechar tiempos de espera disfrutando de las aventuras de Lady Rose, sus locas amigas, el conde de Nortfolk y su estrambótico (sirviente) amigo japonés. También me lo he pasado pipa con los acertijos y juegos de la duquesa Fitzwilliam, así como con todos los enredos y chismes de la historia.

Os lo recomiendo encarecidamente. No os dejéis engañar por la idea de que es regencia porque “la regencia está de moda”. Caed en la capacidad de Lola de trasportaros a un momento determinado de la Historia (ella es una “crack” en esto) y a una situación concreta y diferente. Ingredientes: humor, romance, Historia, viajes…, todo ello adobado por la pluma y la tinta de Lola P. Nieva.

domingo, 10 de abril de 2022

LIRIOS AZULES PARA PEDIRTE PERDÓN, de ANA F. MALORY

 
SOBRE LA NOVELA:

Compré la novela en este enlace deamazon, aprovechando que había una oferta. Tardé un poco en leerla, porque comencé por la primera de la saga. Actualmente ya tenéis también la tercera en preventa y saldrá el 30 de junio.


Sinopsis:

Tras la dulce y tierna Rosas amarillas para conquistar a la señorita Remington, Ana F. Malory nos deleita con otra romántica y deliciosa historia.

Si te enamoras antes de cumplir tus sueños, ¿debes renunciar a ellos?

Alexander Timberlake, vizconde Gainsborough, es un hombre muy ocupado, tanto, que pretende casarse con una joven a la que solo ha visto en una ocasión y logró encandilarlo. Una vez sentadas las condiciones del enlace, regresará a su atareada, aunque aburrida, vida en el campo dejando los preparativos de la boda en manos de la futura vizcondesa. Descubrirla de madrugada, en el puerto, a punto de embarcar rumbo al continente, le obligará a cambiar de planes y actuar en consecuencia.

Carla Talbot, cansada de la tranquilidad de la vida rural, ansía viajar, conocer mundo, correr aventuras... Casarse no forma parte de sus prioridades. La inesperada propuesta de matrimonio de un vizconde, al que ni siquiera conoce, será motivo de una discusión familiar y la excusa perfecta para emprender, sola, el viaje que siempre ha deseado hacer.

Conocer a bordo del Queen Elizabeth al atento, previsor y apuesto Sander Linton, hará que Carla se replantee su futuro y la clase de vida que desea llevar a partir de ese momento. Se siente dichosa y enamorada..., pero la sombra del vizconde se cernirá sobre ella, haciendo peligrar su felicidad.

LO QUE SÉ DE ANA F. MALORY:

Ya he hablado en anteriores ocasiones de cómo conocí a Ana. Os dejo sus enlaces a las redes sociales:

Facebook: Ana F Malory

Instagram: @anaf.malory

Publica en papel con la editorial Selecta. Y en digital, puedes encontrar todos sus libros en amazon si pinchas aquí.

Leer a Ana F. Malory es todo un placer en cualquier momento o situación. Os lo recomiendo.

 

MI OPINIÓN:

Me gustó desde el minuto uno. Carla, esa mujer que, contraviniendo todas las normas sociales y culturales de la época, se pone el mundo por montera y se marcha lejos, ésa es la que me gusta hasta decir basta. Ella es una mujer fuerte, que persigue sus ideales hasta el punto de emprender el típico viaje iniciático; típico en todas las épocas, pero no en una mujer. Me interesó saber cómo va resolviendo los problemas que se le plantean y qué hace cuando las circunstancias le llevan a tomar decisiones vitales.

Me encanta la relación que entabla con Alexander y la actitud de éste, al descubrir el propósito de Carla. En una sociedad donde todo estaba preestablecido y las personas, especialmente los nobles, hacían lo que se suponía que debían hacer —y eso que los hombres no lo tenían tan “mal”—, Alexander decide ser él mismo el que ponga solución al problema que se le avecina. A pesar de todo lo que trae consigo dicha decisión.

No veo el momento de que salga la tercera novela y volver a vivir las aventuras de Los Talbot.

martes, 15 de marzo de 2022

Silencio letal, de Yolanda Revuelta

Adquirí el ebook a través de este enlace de amazon, aunque también lo tengo en papel, como todos los de esta autora. Los puedes encontrar en la Librería Inés de Torrelavega.


Sinopsis de la autora:


Taylor Woodgate es una mujer que ha nacido en el seno de una familia acomodada. Pero a pesar de ello y, con la muerte de su hermana aún reciente, decide dejar atrás su pasado para trabajar en una pequeña librería en Nueva York.

Años más tarde, recibe la noticia de la muerte de su padre y a partir de entonces se desencadenan una serie de acontecimientos que dejarán una profunda huella en su presente.

No se imagina lo que está a punto de suceder. El giro que va a dar su vida cuando vuelve a reencontrarse con el abogado de la familia, Magnus Robertson.

Magnus Robertson es considerado uno de los mejores abogados de Nueva York. Tras la muerte de uno de sus mayores clientes, el empresario James Woodgate, su hija, Taylor, entra en su vida y no va a ser fácil encontrar las respuestas que busca cuando alguien pone precio a la cabeza de la heredera.

Protegerla del peligro se convierte en su batalla particular.

Una batalla de la que no saldrá ileso.

 

MI OPINIÓN:

Ya he contado muchas veces que me encantan las novelas de Yolanda Revuelta. Por eso, en cuanto salió SILENCIO LETAL, corrí a adquirirla en amazon. Y me la devoré.

Una vez más, esta maravillosa mezcla entre romanticismo e intriga me han hecho disfrutar, reír y gritar a partes iguales. ¿He escrito “gritar”? Ah, ¿que no sabíais que les hablo a los personajes? Y, si no se enteran, pues les grito, jajaja.

Solía decir a mi padre, cuando le gritaba a los de la tele: “¡Papá, que no te oyen!” A lo que él respondía: “Da igual”. Y seguía a lo suyo. Pues ahora, ya ves: he heredado de él su carácter (aunque un poco más dulcificado), su vehemencia (aunque la madurez me ayuda a “sujetarme”) y su amor por la lectura. Pero también el hablar (y gritar) con quien no me oye, jajaja.

¿Y por qué hablo aquí de mi padre? Pues por dos razones fundamentales, que se concretan en dos personajes: Viktor y el padre de Taylor. Su relación con ambos ha sido importantísima para mí, a la hora de leer la novela. Cada vez estoy más convencida de que los libros llegan a mí en el momento exacto en que los necesito.

En cuanto a la historia romántica, me gustó que, al principio, la protagonista fuerte era ella. Aunque luego lidian una auténtica batalla de sentimientos. Y sigo pensando que el diálogo, el hecho de colocar las cartas sobre la mesa, decirle lo que sientes, especialmente a la persona a la que amas, evitaría muchos malentendidos y allanaría las relaciones (y hasta el final de éstas). Claro que, muchas veces, si ponemos a hablar a los personajes nada más comenzar, no habría novela, jajaja.

Bueno, la novela tiene una trama muy bien trazada, que te hace elucubrar, intentando despejar las incógnitas que nos llevarán a la resolución del conflicto que Yolanda plantea. Confieso que me lancé a predecir un par de ideas, probándome a mí misma como “investigadora del caso”, jajaja.

Los personajes son uno de los fuertes de esta escritora, con unos protagonistas que enganchan desde el principio. También hay que destacar los secundarios, especialmente Hanna, con quien he llegado a identificarme de una manera insólita.

Y, por último, los diálogos, que construye con una gran solidez. Personalmente es una de las cosas que más me gustan de las novelas de Yolanda, ya que aportan frescura y ritmo a la acción, invitando a seguir leyendo “a ver qué pasa”.

Por si aún no os ha quedado claro, OS LA RECOMIENDO.

 

 

martes, 1 de marzo de 2022

Rosas amarillas para conquistar a la señorita Remington, de Ana F. Malory

SOBRE LA NOVELA:

Compré la novela en este enlace de amazon, aprovechando que había una oferta por la segunda de la saga Los Talbot. Me la “devoré” en día y medio.

Sinopsis:

¿Quién diablos es el señor Talbot y por qué se empeña en coincidir con ella cerca de los rosales de cualquier jardín?

Anna Remington acompañará a su prima en su debut social. Huérfana, y aunque algo mayor para considerarse un buen partido, la joven tiene claro que solo irá al altar por amor y ninguna otra razón la haría abandonar su preciada independencia. Pronto se da cuenta de que no hay riesgo de que su corazón se prende por nadie, apenas tiene pretendientes y ninguno de ellos le interesa. Solo el señor Talbot hace que su pecho se llene de ilusión cuando está cerca, pero está convencida de que la única intención de él es burlarse de su inocencia y utilizarla para cubrir un romance poco conveniente con otra mujer.

Bruce Talbot queda prendado de Anna nada más verla, y aunque nunca le han interesado las jovencitas debutantes, hay algo en esa mujer en concreto que le intriga. Conforme la va conociendo, sus sentimientos se fortalecen, lo que le hace temer acabar irremisiblemente enamorado de ella.

Sin embargo, una antigua amante despechada parece empeñada en malograr la imagen que la Anna tiene de él. ¿Cómo podrá Bruce convencerla de que no es cierto y de que sus intentos por acercarse a ella no son por mera diversión?

 

LO QUE SÉ DE ANA F. MALORY:

La conocí en las Redes Sociales y, más concretamente, en un grupo de lectoras y autoras que teníamos en el norte, del que formábamos parte algunas amantes de la romántica de Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco y Castilla y León.

Posteriormente, tuve la suerte de coincidir con ella y conocernos en persona, en el encuentro literario NORA, en Santander.

Es una autora muy completa, puesto que tiene publicadas varias novelas de romántica contemporánea, otras de regencia, romance histórico y también en una preciosa conjugación de romance y fantasía; además, participa en algunos libros de relatos con temática navideña o de San Valentín.

Publica en papel con la editorial Selecta. Y en digital, puedes encontrar todos sus libros en amazon si pinchas aquí.

Leer a Ana F. Malory es todo un placer en cualquier momento o situación. Os lo recomiendo.

MI OPINIÓN:

Había leído ya la serie de los hermanos Inclán, que me entusiasmó. Recientemente he visto publicitar sus novelas de regencia y me lancé a esta serie de “Los hermanos Talbot”. Y, aunque yo soy más de contemporánea o fantasía, decidí dar una oportunidad a la regencia, viniendo de la mano de Ana.

Y no me ha defraudado. ¿Lo mejor para mí? El lenguaje. Adoro la forma de expresarse, tanto los personajes como la propia narradora. He disfrutado mucho con un léxico y unas expresiones que están demasiado aparcadas en la época actual, pero que suponen una exquisitez a la hora de disfrutar de la novela.

En cuanto a los personajes, me ha gustado mucho la fortaleza de carácter de mi tocaya. Y creo que fue un acierto dotarla de una cabellera pelirroja, de una forma de ser un tanto rebelde y resuelta, a la par que independiente, y no que tuviera “una carita de ángel”. Del señor Talbot, me gustó que, a pesar de estar de vuelta de muchas cosas, no fuera el típico castigador, duro caballero con un pasado oscuro, sino que estuviera abierto a “volver a bailar”, si la dama era la adecuada.

Es una novela corta, de modo que se lee rápido (en mi caso, día y medio). Como es una saga, entiendo que habrá otros hermanos Talbot protagonistas de otras tantas novelas, así que estoy deseando leerlas. De hecho, ya tengo en mi Kindle la segunda de ellas, que comenzaré en breve.

¿He dicho que lo recomiendo? LO RECOMIENDO.

 

sábado, 26 de febrero de 2022

Annie MacAllister ha vuelto, de Lucía Herrero

SOBRE LA NOVELA:

Yo la compré en este enlace de amazon.

La había visto anunciar en las redes sociales y, como conozco a Lucía y me apetecía leer algo bueno, jugué a caballo ganador. Y acerté, por supuesto.

Sinopsis:

Hace ocho años, Annie MacAllister dejó atrás su pueblo, su familia y a su novio, Tom, para cumplir su sueño de convertirse en cantante de country y vivir de su música.

Ahora, en medio de la peor crisis creativa de su vida, Annie ha vuelto a Greytown. Y las musas han decidido acompañarla.

Hay tres cosas que Annie teme más que nada en el mundo: que su carrera se hunda por culpa de su falta de inspiración, volver a quedarse atrapada en el pueblo, y enfrentarse a Tom. Y va a tener que lidiar con todas a la vez.

Porque hay heridas que parecen curadas, pero no lo están, a pesar de los años y de los vaivenes de la vida. Y por eso lo más sensato sería marcharse, pero no puede hacerlo. No, ahora que por fin ha vuelto a componer. ¿Y si se marcha y las musas la abandonan? Necesita un nuevo disco, y no desistirá hasta haber escrito las canciones necesarias para grabarlo.

Y no está dispuesta a dejar que Tom se interponga en su camino. Ni a perder de nuevo su corazón en el proceso.

LO QUE SÉ DE LUCÍA HERRERO: 

 

 

Imagen tomada del blog "Las chicas de los libros".





La conocí hace varios años en las redes y se acercó a mí(me habló por privado)para corregirme un error recurrente que yo tenía como escritora. Nunca se lo agradeceré suficiente: aprendí mucho a partir de aquella conversación y me pasó algunos blogs; después, me molesté en leer, buscar y aprender normas gramaticales, ortográficas y de estilo, absolutamente necesarias para escribir bien.

Años después, la conocí personalmente en el NORA, acontecimiento literario que se celebró en Santander en los años 2017 y 2018. Siempre es un placer poner cara a las personas que conoces en las redes sociales.

He leído varias novelas de ella y siempre me han encantado. De Lucía, como autora, destaco dos características indispensables:

- Escribe con la mayor corrección.

- Sus argumentos enganchan a cualquier edad.

 

MI OPINIÓN SOBRE LA NOVELA:

Como ya he dicho antes, lo más importante para mí ha sido leer una novela con una calidad enorme. Actualmente no es fácil encontrar novelas sin errores y este año ya había dejado dos sin acabar por esta razón, así que me tiré a la piscina que sabía que tenía agua.

Y, en segundo lugar, me ha gustado mucho su argumento. Las últimas cosas que había leído, de Lucía, eran fantasía. Así que volver a la romántica contemporánea con ella era algo que me apetecía. Y he tardado dos días en leerla, de modo que “para mí que vale la pena”.

Además, es de esas novelas que me hacen hablar con los protagonistas. Quien me conoce, sabe de qué hablo. Les digo las cosas, a veces les grito y, alguna que otra, les llamo “gilipollas”. Sí, papá, ya sé que no me oyen, pero ¿y lo a gusto que me quedo?

 En cuanto a los personajes, adoré a Ann, mi tocaya, ya que tiene aficiones muy parecidas a las mías. La he entendido de principio a fin, tanto en sus problemas profesionales, como en su vida personal, familiar o de pareja. Es curioso cómo puedo verme reflejada en una chica de 26 años, que podría ser mi hija (tengo una de esa edad). Yo que he vivido algunas situaciones semejantes en otros momentos de mi vida. Pero la entendía tanto que me llevó a pensar si yo hice lo correcto en mis decisiones.

Y Tom… ¡otro con quien me he identificado en gran medida! Me ha parecido de una coherencia y ternuras que sólo me falta saber qué muso “usó” Lucía para tal personaje.

Los secundarios, también geniales. Esas amigas que no eran, pero pasan a ser tan necesarias, confidentes de ella. Y los chicos: su amigo y socio, su hermano, el antiguo compañero del cole, todos ellos tan necesarios y decisivos. Me gustó hasta las historias paralelas que surgen y que darían para otra novela. Ahí lo dejo, Lucía.

Contextualizada en Nashville y Greytown, en el estado de Tennessee, con su música country, las cabañas de madera, los bares estadounidenses y la guitarra, ¿sabes eso de que dan ganas de viajar allí? O mejor, irse a vivir…

Gracias, Lucía por una novela preciosa.